LA ENERGÍA DEL FUTURO
Vidrio fotovoltaico
El uso de energías renovables es una tendencia en aumento en los últimos tiempos, en los que los ciudadanos están cada vez más concienciados con los problemas que acechan al medio ambiente. El uso de fuentes de energía no renovables como los combustibles fósiles y la energía nuclear provocan numerosos problemas de contaminación. Además, estos recursos no son ilimitados, por lo que cuando las reservas del planeta se agoten, se deberá buscar nuevas fuentes de energía renovables de las que se pueda disponer en cualquier momento.
Antes de que esto suceda, en Gravity Energía hacemos hincapié en el uso y la difusión de las energías renovables aplicadas a nuevas tecnologías que nos permiten diseñar edificios inteligentes y autosuficientes, utilizando fuentes como la energía solar.
La radiación solar ha sido aprovechada por el ser humano durante siglos, utilizando diversas tecnologías que han ido evolucionando en el tiempo. El calor y la luz que emiten el sol pueden transformarse en energía térmica, hidráulica o eléctrica con el uso de diferentes tecnologías solares, entre las cuales se encuentra el vidrio fotovoltaico.
¿Qué es el vidrio fotovoltaico?
El vidrio fotovoltaico es un material de construcción que permite reutilizar la radiación solar para transformarla en energía, capaz de abastecer edificios y ciudades enteras.
Este recurso sustituye al vidrio convencional que se coloca en paredes y ventanas. Una de las ventajas de este material es que se puede personalizar tanto la opacidad como el color del vidrio, para adaptarse al diseño arquitectónico del edificio. Un vidrio fotovoltaico transparente puede sustituir al de las ventanas tradicionales, obteniendo el mismo acabado, pero con todas las ventajas que nos aporta la tecnología de la que dispone este material.
Este material de construcción se diferencia de las placas solares convencionales en que puede integrarse perfectamente en cualquier edificación, tanto en paredes como suelos o techos, e incluso en el mobiliario o en dispositivos tecnológicos como ordenadores y móviles. El vidrio fotovoltaico es el futuro de la energía limpia y sostenible.
En la actualidad, la integración fotovoltaica en edificios, también conocida como BIPV por sus siglas en inglés (Building Integrated Photovoltaics) se ha impuesto frente al uso de los tradicionales materiales de construcción, porque, además de todos los beneficios que ofrece la utilización de energía sostenible, el vidrio fotovoltaico aporta modernidad e innovación al diseño del edificio, además de revalorizarlo.
Funcionamiento del vidrio fotovoltaico
El vidrio captura los fotones del sol
Los rayos del sol emiten fotones que llegan hasta la placa fotovoltaica. Este sistema está formado por dos partes diferenciadas: una parte que funciona con corriente continua y otra con corriente alterna, separadas por un inversor solar.
Al incidir los fotones sobre la placa fotovoltaica se produce un fenómeno fotoeléctrico que hace que la parte que utiliza corriente continua emita electrones, creando una corriente eléctrica de baja intensidad a tensión constante.
La intensidad de esta corriente generada por el efecto fotoeléctrico de los rayos del sol puede variar dependiendo de la irradiancia incidente, es decir, la densidad de potencia de radiacion solar que incide sobre una superficie.
Conversión de la corriente continua a corriente alterna
La corriente continua generada por los fotones del sol sobre la placa fotovoltaica se dirige, con la ayuda de un circuito eléctrico dotado de la protección necesaria, hacia el inversor solar.
Este dispositivo se encarga de convertir esta corriente recibida para transformarla en corriente alterna, con las mismas características que las de la corriente de la red eléctrica, siempre controlando que la señal sea uniforme y de calidad.
Uso de la energía eléctrica generada
La corriente eléctrica obtenida de este proceso puede destinarse a diferentes usos dependiendo de la instalación fotovoltaica. Puede ser vertida directamente a la red de distribución de la compañía eléctrica para ser reutilizada, o bien puede utilizarse para autoconsumo, abasteciendo de electricidad a los diferentes dispositivos del hogar.
La energía eléctrica generada por la placa fotovoltaica puede acumularse para usarla posteriormente (por ejemplo, en las horas en las que no haya sol) o utilizarse al momento.
Ventajas de usar vidrio fotovoltaico
Las ventajas de la integración de la tecnología fotovoltaica en edificaciones son múltiples. La energía solar fotovoltaica nos permite poder generar energía eléctrica de forma limpia y segura, para después poder reutilizarla o almacenarla para posteriores usos. El aprovechamiento de la radiación del sol nos permite poder disponer de una fuente de energía inagotable y de forma totalmente gratuita.
Obtención de energía limpia de forma gratuita
Gracias a la integración del vidrio fotovoltaico en edificios, logramos que estos puedan abastecerse de electricidad utilizando la energía solar. El sol es un bien común, por lo que podemos disponer de él y de sus beneficios gratuitamente. En vez de depender de las compañías eléctricas, los ciudadanos podrán disponer de electricidad en cualquier momento, sin tener que pagar su coste.
Este sistema, por lo tanto, depende de las condiciones climatológicas, puesto que si está nublado o es de noche, no se captará la misma intensidad lumínica que en un día soleado. No obstante, lo bueno de la tecnología fotovoltaica es que nos permite poder acumularla para poder utilizarla en estos momentos en los que los rayos del sol no incidan sobre la placa fotovoltaica.
Este tipo de energía es considerado como una energía limpia, puesto que su utilización no produce contaminación ni causa daños al planeta, a diferencia de otras fuentes de energía no renovables, cuyo impacto en el medio ambiente y en la atmósfera es considerable.
Iluminación natural
Gracias a la avanzada tecnología empleada en el desarrollo de los sistemas fotovoltaicos, logramos que la luz solar pueda pasar a través del vidrio, para iluminar de forma natural la estancia, mientras se aprovecha la radiación emitida por los fotones para la generación de electricidad. La opacidad del vidrio puede regularse para poder dejar pasar menos o más cantidad de luz, según los requerimientos del proyecto arquitectónico.
Aislamiento térmico y acústico
Las propiedades térmicas de este vidrio permiten que se alcancen amplios valores de transmitancia térmica, que indican la cantidad de calor que puede transmitirse a través del material. Esto permite que se alcance una temperatura adecuada en el interior del edificio, mejorando el confort de sus habitantes y ayudando a optimizar aún más los recursos energéticos.
El vidrio fotovoltaico también actúa como un excelente aislante acústico, ayudando a que los ruidos provocados por el día a día de la ciudad no afecten al confort de los integrantes de la vivienda.
Filtro de las radiaciones solares
Las radiaciones electromagnéticas emitidas por los rayos del sol puede provocar problemas de salud en las personas y un deterioro del mobiliario de los edificios. Una de las ventajas del vidrio fotovoltaico existente en el mercado actual es que dispone de un filtro que ayuda a reducir hasta en un 99% las radiaciones ultravioleta e infrarroja.
Optimización de los recursos energéticos
Este material de construcción de avanzada tecnología nos permite un mejor aprovechamiento de los recursos energéticos. Gracias a sus numerosas propiedades, la integración fotovoltaica en edificios nos permite ofrecer a los usuarios un rendimiento óptimo en sus redes eléctricas y en sus sistemas de climatización, mejorando la eficacia de estos sistemas.
Diseño personalizado
El vidrio fotovoltaico es un material muy versatil que puede integrarse a la perfección en cualquier proyecto de arquitectura. Este recurso puede modificarse para alterar su color o su opacidad, uno de los aspectos más interesantes para filtrar la cantidad de luz solar que traspasa al interior del edificio. Pueden fabricarse vidrios con mayores o menores transparencias, incluso totalmente opacos, para poder integrar varios módulos fotovoltaicos en una misma estructura, incluso con diferentes tonos y acabados.
Incremento del valor del inmueble
La integración fotovoltaica en edificios supone un coste elevado que ayuda a revalorizar el edificio. También supone la posibilidad de obtener una calificación superior en la certificación LEED. Esta certificación se otorga a aquellos proyectos que cumplen con unas normas y requisitos en materia de sostenibilidad. Se otorga tanto a edificios y viviendas de nueva construcción como para edificaciones rehabilitadas, e incluso barrios enteros.
La certificación LEED dota al edificio de un gran valor, siendo muy valorada por numerosos constructores. Los propietarios de viviendas con esta certificación pueden llegar a obtener desgravaciones fiscales.
Aplicaciones del vidrio fotovoltaico
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